Ser y Tener

Todo lo escrito en este lugar es muy subjetivo, siempre tendrá una base de caracter profesional debido a mis experiencias y a las de mis compañeros en consulta pero tambien a las de mi vida cotidiana, esto es una manera de entender la salud, una manera holística de ser y tener

domingo, 10 de enero de 2010

Ayuda


La manera de tocar el fondo, solo es una, las maneras de llegar a él, infinitas...

Pero cuando se llega a ese oscuro lugar donde no hay un rayo de luz, la desesperación es tal, que empieza un proceso por el cual (y hablo de mí) uno se empieza a plantear que algo no va bien, algo no funciona...

En principio se piensa que es por esa gota que colmó el vaso donde naufragaste, y chapoteas en ese lodazal pensando, que es de ahí de donde tienes que huir, que es eso y solo eso, lo que te ha llevado a esa situación, sin poder mirar atrás para ver que las miles, millones de gotitas anteriores, fueron minando cada zona de tu ser y destruyendo quizás desde el primer dia de tu vida, quizás desde antes de que nacieras (heredamos los miedos de nuestro padres y cargamos con ellos como si fueran nuestros), y son a fin de cuentas esas gotitas la que ayudaron a llenar ese vaso.

Habiendo tocado fondo, un@ no sabe muy bien que hacer, ni siquiera se sabe quien es un@ mism@, pero has de tener el coraje de no quedarte parado más de lo necesario para coger fuerzas y gritar: AYUDA, necesito ayuda...

Se sabe que lo has tocado cuando solo queda subir.

De todos los tipos de pacientes que puedo tener, cada uno distinto totalmente al los otros, hay entre ellos sin embargo un gran nexo que los vincula ( nos vincula), el no querer sufrir más dolor...

Y no importa que sea un torcedura de tobillo o un trantorno emocional x (todos los padecimientos conllevan un problema emocional determinado y del cual podemos aprender para no caer en ello otra vez), porque esas personas han decidido cambiar a mejor, evolucionar, crecer.

No sabria decir a dia de hoy, que es mas dificil, si tocar fondo o salir de él (y he vivido todas las situaciones, ademas de como paciente tambien como terapeuta), pero si tubiera que inclinarme hacia uno de los lados, diría que es mas dificil llegar a ese oscuro lugar (como dice Sabina "donde habita el olvido") ya que nuestra tendencia a disfrazar las cosas llega a ser una mentira tal que se nos convierte en una verdad palusible solo para nosotros, y en algunos casos tan feaciente (la mentira) para el terapeuta que trata como incluso los amigos/familia que viven a nuestro alrededor y me remito a una entrada anterior del blog donde hablaba de la alegría y que todos hemos visto o hemos hecho una sonrisa que ni siquiera nos la creiamos nosotros mismos, para encubrir eso que tanto nos duele, eso que nos hunde...

Doloroso ¿verdad?, pues no más que ver como intentas salir de ahí y no saber como y no tener como, porque si sabes como, las herramientas pueden no ser de buena calidad pero sabes usarlas pero no saber usarlas aunque sean las mejores y estén a nuestro alcance no vale para nada, y aveces por desconocimiento cogemos la menos indicada, que además puede hacernos más daño por usarla que por no hacerlo, y me refiero, y aquí me mojo totalmente al decir que hay que saber elejir a nuestros terapeutas, porque es él quien nos enseñará a utilizar esas herramientas para construir una escalera que nos lleve a la luz, lejos del fondo donde caimos.

En mi caso y quiero que esto quede claro ya que es una pregunta muy frecuente de los pacientes a los terapeutas, yo tambien soy una persona que siente y padece, y aunque sepa ayudar a las personas, también necesito ayuda de vez en cuando o es que por saber arreglar un bloqueo no puedo sufrirlo?

Claro que si, gracias a Dios tambien los terapeutas sufrimos bloqueos y asistímos a consulta de otros terapeutas y crecemos como personas y como terapeutas, pues quedando claro este punto me remito a mi experiencia donde, el no saber quien era, me llevo a pedir algo que intuia pero que me enmascaraba a mi mismo y era esa ayuda que, "no queremos que nos ofrezcan porque queremos pedirla" ( no ayudes a quien no pide ayuda porque te alejará de su lado) y solo cuando nos de la gana, cuando tocamos fondo.

En mi caso el bloqueo surgió de la noche a la mañana como se suele decir y de no estar muy bien (siendo franco) a estar fatal, perder peso por no comer (lo conoceis verdad) no conciliar el sueño y con ello no descansar (tambien sabeis lo que es...) y tirar de todas tus reservas de energía y no poder trabajar y tener que hacerlo ( y en mi caso como terapeuta, con lo que conlleva) y saber que una de dos o sales de esta o te quedas pajarito como dicen en mi tierra.

Gracias a una persona en mi caso un tio al que quiero mucho y siempre le estaré agradecido fué quien (conociendome muy bien desde que nací) me busco una terapeuta especializada en psicosomática, la cual tenia que tener unas determinadas características: Mujer, de mi misma edad más o menos y que conociera el terreno a la hora de tratar enfermedades "crónicas" (esas enfermedades solo existen en la medicina alopática, ya que lo crónico es aquello que no es tratado para ser curado) en mi caso diabetes, y ojo no soy "diabético", padezco una diabetes (las palabras nos hacen esclavos hermanos), así fue como di con A.M.

He aquí como tomé la decisión de dejar de vivir en el fondo para querer vivir en la luz... y señores no es facil porque los bloqueos (lesiones) tienen grados y aveces tan grandes que necesitas mucha voluntad, fuerza y coraje para no solo empezarlo si no además continuarlos (tratamientos).

Creerán algunos que esta declaración es echar piedras sobre mi tejado de terapeuta, sin embargo es lo más sincero y más honesto que un profesional de la salud puede decir a las personas que tienen miedo a ir a algún osteópata, psicologo, psicosomatista en general y pedir ayuda.
Decirles: sé lo que te ocurre o almenos me hago una idea porque tú y yo nos parecemos, los dos somos personas que padecemos, personas que sentimos, y en mi caso intentaré ayudarte para que te cures (el terapeuta no cura solo ayuda) con todas las herramientas que estan en mi mano y que sé utilizar...

El terapeuta no debe de tener referencias nuestras o si las tienes que sean cuantas menos mejor, vículos de ningún tipo (de ahí que no se deba tratar a familiares, parejas, amigos, conocidos) salvo muy contadas excepciones, donde el esfuerzo del terapeuta es tal debido al vínculo emocional que te une a tu paciente y que puede nublar un buen criterio profesional.

En el terapeuta debemos buscar un movimiento estable, una fluidez que nos ayude a ubicarnos para ser nosotros mismos.

Los pacientes hemos de serlo en todos los sentidos, y no sentirnos ni buenos ni malos pacientes, yo voy a mi terapeuta ha expulsar lo que me hace daño, y no a flagelarme sobre que pensará de mí por haber hecho y dicho algo que ademas me hace más daño, desde correr con un tobillo con una lesión hasta llamar a esa persona que te hace daño solo con escuchar su voz, o jugar o beber o no comer, porque es eso lo que tienes que cambiar y para ello venis, vamos, a un profesional, porque necesitamos ayuda.